Como aficionada al surf soy consciente de que nuestra piel se expone tanto a los rayos del sol como a su reflejo en el mar. Aquí tienes 5 consejos para una conseguir una protección efectiva y evitar ese efecto envejecido de la piel. Porque además de protegerte del sol debes hidratar al máximo para frenar la formación de arrugas.
1. ¿Cuál es tu fototipo de piel?
2. Elegir bien la crema y su FPS
El factor de protección solar (FPS) es una clasificación que sirve para calcular el tiempo que nuestra piel puede estar expuesta a la radiación solar sin quemarse. Por ejemplo, las personas de los fototipos I y II tardan de dos a 3 minutos en quemarse. Una crema de FPS de 10, les hará resistir sin lesiones cutáneas entre 20 y 30 minutos (2 o 3 x 10).
3.Usar la crema con criterio individual
Una persona del fototipo IV, quizás el más normal en el área mediterránea, puede aguantar unos 30 minutos a pleno sol sin quemarse. En teoría le bastaría con cremas con FPS de 10 para poder pasar hasta cinco horas bajo el sol en pleno verano. Pero la cosa no es tan sencilla y aunque no se quemase, esta persona podría sufrir una insolación severa o un golpe de calor, ya que son demasiadas horas.
4. Tener en cuenta el “espectro de protección”
Hay cremas en cuyo etiquetado pone ‘amplio espectro’ y otras que indica ‘ muy amplio espectro’. La diferencia entre ambas está en que a los rayos UVA se añade protección también contra los ultravioleta de tipo B o UVB. Si bien la UVA es la que puede provocar mutaciones en el ADN y por tanto melanomas, la UVB sería menos energética, pero la responsable del bronceado y las quemaduras del sol, es decir las lesiones directas.
5. Elegir bien el envase de la crema
El envase de una crema es importante en cuanto a que debe protegerla del calor y la radiación, de modo que dure más tiempo en óptimo estado de conservación, así como que la haga transportable y cómoda de almacenar. También en el modo de aplicación, que puede ser más o menos eficaz y además puede aprovechar al máximo las dosis contenidas. Se recomiendan que los envases sean opacos, ya que protegen del calor, que descompone la emulsión cremosa y hace que su aplicación sea defectuosa.